A todos nos gustaría que los neumáticos durasen para siempre, pero no es así. Cada vez que utilizas el coche sufren un desgaste que va acortando su vida útil. El número de kilómetros que puedes hacer con ellos depende de cómo conduzcas, del estado del coche y de la calzada, de la temperatura y de la calidad de los neumáticos que tengas montados. Los neumáticos no tienen una fecha concreta de caducidad, pero sí se puede ver en ellos ciertas características que dan señales de que deben ser cambiador.